FARANDULA INTERNACIONAL

David Bisbal, en sintonía por una buena causa

David Bisbal hace discos pensando en compartir su contenido con el público.

No se deja influenciar en ese sentido por las directrices de la industria, cuya máxima instrucción consiste en la elaboración paulatina de sencillos.

Dos, tres o máximo cuatro canciones en el rock y en el pop quedan habilitadas para sonar en radio y llegar hasta los terrenos de lo que se considera un éxito musical.

Los demás temas de un álbum permanecen relegados y a eso es que se opone el artista español, que en este momento adelanta la gira Hijos del mar.

Para Bisbal, todas las canciones deben tener salida y merecen ser interpretadas en vivo y en directo.

Por eso, cada una de sus creaciones tiene cuatro o más versiones para ser tocadas en concierto con el fin de que puedan lograr el único objetivo que le interesa al español: el oído de sus seguidores. Gracias a esa oferta generosa en números y en sonidos es que para él cada vez es más difícil seleccionar el primer sencillo, esa punta de lanza que tendrá el propósito de marcar el rumbo de las demás canciones del trabajo discográfico.

Antes se jugaba el destino de sus discos con mucha más convicción pero desde la realización del material de Tú y yo (2014) le empezó a costar trabajo y a partir de ese momento compara el ejercicio de la selección de canciones con la actividad de un entrenador en programas como La voz, en los que ha tenido presencia en distintos roles y en diversos países.

“Para el disco Tú y yo, por ejemplo, tenía yo varias posibilidades para presentarlo.

Con el equipo pusimos las canciones sobre la mesa y me gustaban todas, así que me retiré de la reunión y dije: ‘hacemos lo que ustedes decidan’.

No quería lanzarme a la piscina solo, así que pedí opiniones por todos lados y llegamos a la conclusión de que el sencillo Diez mil maneras tenía buen rollo tanto en el registro como para una posible presentación, así que nos fuimos por ese camino”, comenta David Bisbal quien con su tour Hijos del mar ha visitado muchas ciudades españolas, y se prepara para aterrizar en América en las próximas semanas para presentarse en plazas como Managua, San José de Costa Rica, Ciudad de Guatemala, Monterrey, Acapulco, Ciudad de México, Ciudad de Panamá, Montevideo y Buenos Aires y, por supuesto, Bogotá.

Los trabajos más recientes, Tú y yo y ahora Hijos del mar, le han servido a Bisbal de conector entre su reconocida propuesta acústica y su intención de regresar al pop a partir de sonidos retro, pero sin perder la perspectiva de lo que se está escuchando en la escena contemporánea en Iberoamérica.

El artista español está en la tarea diaria de repotencializar su sonido e ir en la búsqueda de la conquista de otras latitudes. Ese ha sido su lema en el presente tour y ahora su propuesta artística está arropada con un propósito humanitario.

Para fusionar la música con su rol social, David Bisbal se presentará en Bogotá el próximo 27 de octubre en el Teatro Mayor Julio Mario Santo Domingo, en el marco de su gira Hijos del Mar, realizada en beneficio de Unicef Colombia.

El español no ha sido ajeno a esta organización internacional dedicada a ayudar a los niños en situación de vulnerabilidad en el planeta, ya que el pasado 19 de abril, el Comité español de Unicef lo nombró como uno de sus embajadores en Madrid.

“Mi deseo y esperanza es poder conseguir, entre todos, una vida más digna para los niños y niñas en todo el mundo”, comentó el músico que arrancó su actividad con pie derecho al lanzar a comienzos de este milenio su primer sencillo Ave María, que fue un éxito en España y América Latina.

Desde el lugar en el que escribe sus canciones, que nunca es el mismo, Bisbal siempre tiene la incertidumbre de saber si lo que compone le llegará a la gente.

A él le gusta presentar cosas distintas cada vez y eso hace que el interrogante sea mayor cada vez que se encierra en un estudio de grabación a materializar sus ideas.

Según el español, ningún artista tiene la clave del éxito porque sí emplea una fórmula una vez, a la siguiente puede no funcionar.

Por eso es que su decisión siempre es tomar riesgos.

“En la industria musical es necesario ser un camaleón.

Para los nuevos discos, por ejemplo, la idea ha sido que los estilos por naturaleza se acoplen y que no se escucharan forzadas las participaciones.

Creo que he logrado que por fuerza natural cada invitado haga su arte con el fin de que la gente lo disfrute a plenitud.

A la hora de la verdad, cuando se juntan los talentos hay que hacer que los registros se armonicen. Eso es todo”.

La venta de entradas para el show de David Bisbal en el Teatro Julio Mario Santo Domingo, en Bogotá, a beneficio de los niños de Unicef en Colombia, está disponible desde ayer a través de www.primerafila.com.co, en todas las taquillas de Cine Colombia a nivel nacional y a través del número (1) 4042463.

Fuente: elespectador.com