ARTISTAS ECUATORIANOS

Los ritmos andinos atraviesan fronteras

El kichwa, castellano y japonés se plasma en una de las canciones de Juyanis Band. Su tema Nari Tai (Llegar a Ser, en japonés) está entre los seis melodías del último disco titulado ‘La vida es todo’, que fue grabado una parte en Ecuador y otra en Japón. Los seis integrantes kichwas de Juyanis, oriundos de Cotacachi, provincia de Imbabura, situada en el norte de Ecuador, le apuestan a una versión renovada de la música tradicional andina con la fusión de kenas, sampoñas, rondínes, charangos con guitarras y bajos eléctricos y batería. En los últimos tres meses, un video realizado con un teléfono celular grabó al grupo interpretando Es mi tierra, otro de sus trabajos. Este producto audiovisual se difundió en las redes sociales por el concurso I Wanna be Famous (IWBF) (Yo quiero ser famoso, en inglés). Esta composición, de autoría de Luis Tabi, director de Juyanis, relata la vida de un emigrante, parecida a la de cientos de indígenas imbabureños, principalmente comerciantes y músicos, que han viajado por el mundo. “En mi ausencia todo ha cambiado, nada es igual como lo recuerdo”, es parte del estribillo. El IWBF es un certamen en Internet mediante el cual dos agrupaciones participan cada semana en busca de votos de preferencia de los cibernautas, explica Tabi. El que obtiene mayor apoyo pasa a la segunda de cuatro fases. La iniciativa de incursionar en este certamen surgió en Japón, a mediados del 2014. Esta banda ecuatoriana, que tiene 15 años de vida, realizaba una gira por las ciudades de Tokio, Nagoya, Osaka, Hiroshima, Shimonoseki y Fukoaka. A esa nación asiática arribaron gracias a la ayuda del otavaleño, Luis Maigua, principal de la compañía artística Native Spirits Japan, que también dirige a Sisay, otro grupo indígena que desde hace dos décadas conquistó al público nipón. Esa firma les proporcionó una vivienda. No les fue difícil, por ejemplo, acostumbrarse a dormir en el futón, la cama tradicional japonesa, que consiste en un delgado colchón que se coloca en suelo, explican. El contacto con los japoneses fue decisivo. “En Nagoya el público es muy animado. Uno se siente famoso». En una oportunidad, en los tres meses que permanecieron en Tokio, David Tabi, guitarrista y bajista de la agrupación, propuso a sus compañeros inscribirse en el certamen Yo quiero ser famoso, organizado por la compañía My Perfect Internet, con sede en Las Vegas, Estados Unidos. Los integrantes aceptaron con titubeos registrarse en el concurso. La propuesta coincidía con la grabación del tercer trabajo discográfico de Juyanis Band: ‘La vida es todo’ (2013). Antes habían producido los CD ‘Juyailla –hermoso- Cotacachi’ (2005) y ‘En tu corazón’ (2010). También han grabado el DVD Live en Otavalo (2006) En la competición ganaron dos encuentros frente a grupos de Italia y Filipinas. Pero perdieron por una mínima diferencia ante una agrupación de Bulgaria, por lo que Juyanis no pudo llegar a la final general. Sin embargo, se alzaron con el premio a la mejor Banda Musical. Esto gracias a la campaña ‘Yo soy Juyanis de Ecuador ¿Y tú?’, que emprendieron en su cuenta en Facebook: Juyanis Band. Ahí recibieron el respaldo de cientos de compatriotas. La visita a Japón fue algo interesante para su música. Regresaron con otro pensamiento de la vida, cultura, su idioma materno y la visión de mantener la esencia de la música andina. También decidieron asumirla como una profesión adicional, porque antes era solo un hobby. Yuyani, que en español significa amor, impone dos conceptos en sus composiciones: la belleza de la mujer y de la naturaleza. Ahora también incursionan en una temática social que revaloriza el ser indígena. La mayoría de integrantes proviene de comunidades rurales. Luis Tabi (vocalista principal y kena) y sus hermanos David (piano y acordeón) y Moisés, (charango, guitarra y bajo) son oriundos de la comunidad de Chilcapamba. En esa localidad, incluso, instalaron un estudio de grabación para las producciones de este conjunto. Carlos Guadinango (kena, sampoña, rondín) es vecino de Santa Bárbara. Mientras que César Flores (batería y cajón peruano) proviene de Turuco; Geovanny Artes, (Kena, sampoña y violín) de Pilchibuela. Se sienten orgullosos de ser el primer grupo de Cotacachi en actuar en un escenario internacional. Ahora alistan el viaje a Las Vegas, como parte del premio del concurso, previsto para el 31 de agosto al 4 de septiembre.