Roberto Cobos: El Pitbull de la Chicha

Roberto Cobos es un hombre alegre que contagia su espíritu en cada una de sus presentaciones. “Es lo que me gusta y lo hago con profesionalismo”, expresa el intérprete guayaquileño, quien hace 23 años se involucró en el mundo artístico y reside en Urdesa central desde hace 20.

Todo comenzó cuando aceptó la propuesta de un amigo para ofrecer serenatas durante el Día de la Madre en las calles 11 y Cuenca. “Él me dijo ‘tienes buena voz’ y trabajamos hasta el amanecer”, manifiesta el cantante.

Asegura que desde entonces se sintió atraído por la música tropical, lo que le llevó a ser vocalista de agrupaciones como Los Hechiceros, Los Cinco Ases, de Guayaquil; y de Don Medardo y sus Players. Asimismo, durante doce años fue la voz principal de Aguilar y su Orquesta.

La mayoría de sus presentaciones son fuera de la ciudad en eventos masivos, aunque también ofrece shows para eventos privados en los que incluye la animación.

Temas como La cosita con la orquesta Los Daulis, o Mal pago junto a La Clave, llevan su voz. Explica también que sus adaptaciones a la cumbia, de temas del recuerdo como ¿Por qué te tengo que olvidar? de José Feliciano, Me llamas, de José Luis Perales, o Cama y mesa, de Roberto Carlos, han tenido aceptación del público.

Incluso este último tema, asegura, ocupó los primeros puestos en varias radios como canción del año, en el 2014. “Son temas que han quedado grabados en la mente de las personas y como lo piden en las fiestas, ahora los hacemos bailables”, dice Roberto, quien desde hace unos cuatro años es solista.

Afirma que selecciona su repertorio según su público, desde baladas, boleros, hasta cumbia o salsa, aunque ya ha recibido sorpresas. “Estaba en un evento privado y asumí que querían otro tipo de música, hasta que el dueño de la fiesta me dijo ‘oiga, yo lo contraté para que cante chicha’, hay mucha gente a la que le gusta”.

Además el Cobos dice que en los últimos años, el público se siente más atraído por la música nacional, por eso tiene covers con albazos, y se adapta a todo lo que le pida el público.