FARANDULA ECUATORIANAGENERAL

Alumnos y amigos, legado de Carlos Rubira Infante

Si él quisiera, podría quedarse en casa descansando, sin embargo, su amor por la música y su deseo de enseñársela a las nuevas generaciones ganan.

Al menos dos veces a la semana, el compositor Carlos Rubira Infante se traslada hasta la Escuela del Pasillo Nicasio Safadi, en el Museo de la Música Popular Julio Jaramillo, para nutrirse de las voces de sus alumnos.

Es allí en donde los escucha cantar y, siempre que tiene oportunidad, les da consejos para mejorar sus técnicas musicales.

A sus 96 años el guayaquileño, que este 2018 es parte de los nominados al Salón de la Fama de los Compositores Latinos y cuya votación se cierra a la medianoche de este domingo, es admirado no solo por sus amigos o colegas, sino también por sus estudiantes, en quienes ha dejado la mejor de las huellas: el amor a la música nacional, a sus raíces.

Es el caso de Fernando Vargas (protagonizó en 2016 Julio, el musical de JJ), quien fue alumno del autor de Chica linda cuando él estaba más activo (2008).

“El mejor legado que puede dejar Carlos Rubira Infante en mí es haberme cambiado la forma de pensar con respecto a mi país, con el orgullo que debe sentirse ser ecuatoriano, de la tierra que nos vio nacer”, cuenta el cantante, y agrega que entre 2006 y 2007 tuvo la oportunidad de grabar a dúo ocho temas con Rubira.

No se pudo sacar el disco por falta de recursos.

Otros estudiantes, que no necesariamente siguen canto –Rubira es asesor de esta materia–, también sienten mucha admiración por el creador de letras como Playita mía, Esposa o Guayaquil, pórtico de oro.

Por ejemplo, Ingerborth Constantine (arpa) y Julio Santander (guitarra) destacan su pasión y dedicación.

Afirman que de vez en cuando aparece en alguna de sus clases, opina sobre el trabajo que están haciendo y los motiva a seguir en la música.

La directora del Museo Julio Jaramillo, Jenny Estrada, siente un cariño muy especial por Rubira, no solo porque fue uno de los primeros artistas que la apoyaron en su proyecto de la Escuela del Pasillo, sino porque los une una gran amistad.

“Ha sido una cosa muy entrañable verlo a él aquí como un maestro más, siendo una gloria nacional, siempre hemos podido apreciar su sencillez y su calidad humana”, refiere la líder de este espacio creado hace diez años.

Artistas como Hilda Murillo consideran que “en el Ecuador hay muchos valores tanto en la música como en la composición” y que “en buena hora, antes de que él se vaya de este mundo, se reconozca el valor que ha dejado Rubira y que sigue dejando, porque a pesar de sus años todavía sigue creando, todavía sigue recordando todas las historias que él ha escrito”.

“Sentimos que es un logro de Carlos Rubira (Infante), que es uno de los más emblemáticos compositores de nuestro país, es un logro de Sayce, en el sentido de que nuestro director ejecutivo (David Checa) fue invitado, por la imagen internacional que tenemos, a ser parte del directorio de la comisión de nominaciones del Salón Latino, y pudimos proponer que sea un compositor ecuatoriano como lo es Rubira, para que ojalá este año sea incorporado.

Así que sentimos que es un espaldarazo a la gestión, al país y a lo que hacemos.

No nos queda más que pedirle a la gente que vote, esto es de elección abierta”, dice el artista Juan Fernando Velasco, presidente de Sayce, quien además sostiene que en las plataformas digitales de la entidad están colgados los links para la votación.

Alumnos y amigos, legado  de Carlos Rubira Infante

Carlos Rubira Infante es autor de al menos 600 canciones. Su fuerte son los pasacalles.

Fuente: eluniverso.com