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En barrios y redes sociales se pide más cobertura de agentes de tránsito

La calle Eloy Alfaro, que permite ir del sur al centro de Guayaquil, dispone de tres carriles para el tránsito particular, más un cuarto para la Metrovía. Está prohibido el parqueo, pero esa restricción se elude en la zona del hospital Efrén Jurado, en el cruce con Argentina.

Choferes de taxis regularizados e informales se encolumnan ofreciendo sus servicios, pitando a veces de forma reiterada para llamar la atención de potenciales clientes, dejando solo un carril libre para el resto de conductores, que se topan con una especie de embudo.

Entre las 07:30 y 08:30 del lunes 23 no hay agentes de la Autoridad de Tránsito Municipal (ATM) para ejercer controles respecto de aquella anomalía.

La ATM cuenta con 644 uniformados. La ciudadanía los ve más en el casco comercial, como a lo largo de la avenida 9 de Octubre. O en la zona de la U. de Guayaquil, afuera de la terminal, desvíos habilitados en la avenida de las Américas. O en la conflictiva Bastión Popular, porque allí es intensa la circulación de buses y tricimotos por calles estrechas y empinadas.

Pero conductores y habitantes solicitan a la ATM cobertura en otros puntos. En Mapasingue, el profesor Ramón Sánchez pide personal a las 06:30 para resguardar a decenas de estudiantes del colegio Raúl Huerta Rendón, que deben cruzar la av. Las Aguas, refiere, en medio de un abarrotado tránsito. Comenta que uniformados llegan al sitio casi a las 07:00.

En Pascuales, Lino Arreaga dice que a partir de las 18:00 es muy difícil cruzar la calle 28 de Agosto, la principal del sector, porque aumentan el tránsito y la circulación de motociclistas a velocidad excesiva, según él.

En la autopista Narcisa de Jesús, conductores que viven en las urbanizaciones al borde de la vía se quejan de la imprudente aceleración en la que supuestamente incurren choferes de buses. Afirman que algunos van por el carril de velocidad y dejan allí pasajeros, algo que la ATM controló en su momento, atendiendo quejas ciudadanas.

En Twitter, las demandas de cobertura llegan a la ATM a través de la cuenta@ATMGuayaquil. En días recientes, el internauta @fjvs1972 pidió llegar a la avenida Primera de Mapasingue este. “Tráfico infernal”, escribió en referencia.

El tuit de @Osdrane fue: “Urge un agente que controle giros indebidos en carril no permitido de Francisco de Orellana hacia Baquerizo Nazur, presten atención”. Y@aiturburu mencionó: “Sucre con Quito y Machala deben poner un agente para que multe a quienes tapen la intersección e interrumpen a la Metrovía”.

Andrés Roche, gerente de la ATM, considera que Guayaquil dispone de un número suficiente de uniformados y habla de desterrar “el viejo concepto de una sociedad tutelada por agentes en cada esquina”.

“No debemos aceptar la idea de que solo cuando tengo un agente de tránsito al frente no hago doble columna, no me paso una roja, no hablo por el celular, no bloqueo la intersección. Debemos y ya es hora de entender que mis malas acciones como conductor generan tráfico, no la falta de agentes”, afirma Roche, y agrega que en septiembre próximo se definirá el número de uniformados necesarios, remarca, para incorporar a la planta de la ATM.

En ese sentido, en el 2017 habría un curso de formación.

Respecto de la desatención a la señal de no estacionarse, taxistas la obvian también al pie del Consejo de la Judicatura, en la ciudadela La Florida.

De acuerdo con el Código Orgánico Integral Penal, ello se sanciona con una multa equivalente al 30% del salario y la resta de 6 puntos de la licencia. Ese 30% equivale a $ 109,8.

FUENTE: eluniverso.com