DEPORTES INTERNACIONALES

Boca le ganó a Junior en la Bombonera con un gol de Cristian Pavón

Frente al ordenado Junior contó con la lucidez de Pablo Pérez , que tejió los hilos en el medio campo, y el extraordinario presente de Cristian Pavón , quien parece empeñado en romper todas las marcas posibles en cuanto a partidos consecutivos: ya lleva 62.
No es casual que ambos hayan sido los protagonistas en la jugada del gol que abrió un partido cerrado.
Pérez clarificó hacia su izquierda, Emmanuel Mas, de muy buena tarea, abrió para Pavón y el Nº 7 se hamacó hacia su derecha para, desde el ángulo del área, definir con un remate junto al palo izquierdo de Viera.
Lo de Pavón ya no sorprende. Él sabe que cada partido que juega es un casillero más que avanza rumbo al premio mayor: jugar el Mundial de Rusia.
A fuerza de una velocidad todo terreno y gol, su nombre parece leerse cada vez con mayor nitidez en la lista de Jorge Sampaoli.

El de anoche era un examen fundamental para Boca. La Copa Libertadores 2018 es una de las más difíciles de los últimos años, con 15 de los 24 campeones de América en competencia.

Y si bien la igualdad sin goles en Perú, frente a Alianza Lima, no había sido un mal resultado, era fundamental para las ambiciones xeneizes quedarse con los tres puntos en la Bombonera.

Sobre todo porque el equipo acumulaba casi dos años y cinco partidos de Libertadores sin triunfos (dos 1-1 frente a Nacional, por los cuartos de final de 2016, las dos derrotas ante Independiente del Valle y el 0-0 de este año en Perú).

Dos partidos jugados, dos ganados, cinco goles a favor y ninguno en contra.

No sólo eso: una semana después, el miércoles 18, el conjunto azul y oro recibirá a Palmeiras, en lo que promete ser un partido clave para el desenlace del grupo.

La victoria frente a Junior permite viajar a Brasil con más tranquilidad.

La gente también jugó. Pasó de la efervescencia inicial (incluido el canto del feliz cumpleaños a la institución) al nerviosismo, con el «esta noche, cueste lo que cueste»).

La figura de Teófilo Gutiérrez fue el blanco elegido por los hinchas locales para descargar toda su furia.

El delantero colombiano se destaca tanto por su buen nivel como por su afición a la provocación.

Lejos de esconderse, Teo es de esos futbolistas que se agrandan cuando lo hostigan.

El abucheo fue total desde temprano. Primero cuando la voz del estadio lo nombró en la formación visitante, luego durante la entrada en calor, y finalmente cuando fue reemplazado por Jonatan Alvez.

Penal errado por Wanchope

Apenas un puñado de semanas parecen separar a la institución de la Ribera de una nueva vuelta olímpica.

De su estrella número 67. De un bicampeonato, que no lograba desde aquel combo Apertura 2005/Clausura 2006, con Alfio Basile como DT.

Es el líder del torneo argentino desde hace casi 500 días (480).

Y en ese rubro ya superó un récord establecido por Carlos Bianchi (39 fechas consecutivas en la cima).

Sin embargo, todo Boca late más fuerte cuando lo que está en juego es la Copa Libertadores.

Los futbolistas, el entrenador de turno, la dirigencia y los hinchas sienten un cosquilleo inigualable cada vez que la Bombonera se ilumina para una cita continental.

El sueño de levantar la séptima Copa se convirtió en obsesión. Incluso, algunos creen que es una obligación.

Que es vuelta olímpica o frustración.

En medio de esa histeria, Boca dio un paso importante rumbo a los octavos de final.

Y aunque se le siga discutiendo su nivel de juego, y el penal malogrado por Wanchope Ábila le dejó la incertidumbre hasta el final, los resultados suelen acallar críticas.

Boca sólo se concentra en ganar. Y lo está consiguiendo

Fuente: lanacion.com