ARTISTAS ECUATORIANOS

Hilda Murillo: ‘La Dama de América’

Nació en Guayaquil, el 15 de diciembre  de  1951. Pertenece a una familia de artistas; su madre Fresia Saavedra Gómez, es una reconocida artista y cantante de música ecuatoriana; lo mismo que su padre Washington Murillo, era músico; quienes la iniciaron en el interés por la interpretación musical.

Es una de las cantautoras ecuatorianas de gran reconocimiento y que, a través de su sólida carrera, ha sabido perdurar en el ámbito musical.

Conocida en el mundo artístico  como: ‘La dama de América’ o «La Triunfadora de América».

Siendo aún niña, ya realizó su primera grabación de melodías infantiles, como: “El ratoncito Miguel”; y la “Marcha de las letras”.

Cuando doña Fresia Saavedra era ya toda una estrella de la música ecuatoriana, llevaba a su hija  Hilda  como acompañante a los estudios de grabación, en donde la niña se familiarizó con el ambiente artístico y musical y se interesó por grabar otra canción, titulada “La canción de los domingos” .

La que fue grabada por el sello ONIX, cuyo deseo  resultó  un  gran  éxito y se constituye en el inicio de una carrera luminosa, en donde la Princesita de la Canción, como fue bautizada por el popular hombre de radio Sr. Rafael Fout en los Estados Unidos, país del que Hilda Murillo ha viajado con frecuencia para cumplir compromisos artísticos y realizar grabaciones con varios disquera que se interesaban  por su producción musical.

Estaba casada con el fallecido promotor artístico Pío Cupelo, quien junto a su esposa Hilda Murillo y doña Fresia Saavedra, organizaban programas artísticos y presentaciones de artistas nacionales en escenarios nacionales e internacionales.

Hilda Murillo, por su cuenta y también junto a su madre Fresia Saavedra han realizado producciones discográficas y han grabado numerosas canciones que se han popularizado en el público ecuatoriano, además de España, Italia y Estados Unidos con la comunidad ecuatoriana de residentes en esos países.

Hilda Murillo Saavedra, ha representado al Ecuador en el Festival OTI (1974) en México. En su juventud estudió medicina, pero se retiró cuando cursaba el tercer año para dedicarse a la actividad musical.

En relación a su carrera artística ella se refiere: “Mi madre me enseñó a amar nuestra música, pero me inclino más por las baladas; pero soy además una mujer atrevida que se adapta a todos los estilos musicales; una muestra es el haber incluido “corazón partío” (Alejandro Sanz) en un CD recién editado y también “Que alguien me diga” (Gilberto Santa Rosa), el título del Albúm se titula “Gracias a la vida”.

Con su estilo muy propio, ha interpretado con su melodiosa voz numerosas canciones en varios géneros: romántico, bolero, ranchera, vals y también temas de música nacional. Un tema que se popularizó en el ambiente artístico, ha sido “Palabras, palabras” (1970).

Ella expresa:“En mis shows, trato de compartir con el público temas nuevos, no obstante siempre me piden los mismos temas”.

La artista se mantiene en permanente actividad artística y musical, sea en su show de la TV, en escenarios con asistencia masiva de público y en otros exclusivos, como en la “Posada de las Garzas” (Circunvalación Norte 536; Urdesa en Guayaquil).